Los días eran iguales a todos los demás, con apenas un poco de luz artificial y algo de ventilación, no que lo tomara demasiado en cuenta pues después de todo el no poseía la misma necesidad humana de consumir oxigeno para realizar el intercambio de gases que era vital en el funcionamiento de las células. Lo que él no poseía ni en sus sueños más desquiciados. Bien al menos podía tener sueños, si es que a esa secuencia extraña de imagenes que veía cada vez que entraba en un modo de descanso podía llamar "sueños" que bien podían ser imagenes almacenadas, recuerdos de las primeras veces que estaba en funcionamiento o de las pocas veces que había salido de la bodega para explorarse un poco en los alrededores de la dichosa tienda o incluso el estar un momento en la ciudad. Detestaba cuando se trataba de sus primeros recuerdos.

Había un insoportable silencio, un silencio que no sabía si odiar cada vez más por pasar con el días enteros o agradecido porque de otra forma se volvería loco si escuchaba un ruido desorganizado de manera constante. Podría cambiarlo, empezar a emitir ruido, aunque ¿qué ganaría con ello? llamar la atención de los empleados que lo que menos querían era verle la cara a alguno de los robots que estaban ahí arrumbados como los juguetes descompuestos que eran -menos él, claro, él no era un juguete era una maquina absolutamente perfecta que era desperdiciada gracias a la ineptitud humana- no serviría de nada. Tampoco era que tuviera muchas ganas de ver su rostros formando una mueca en señal de disgusto.

Salió de su lugar, sin embargo. Poco había que hacer en donde estaba, no lograría nada al dar vueltas entre las esquinas poco iluminadas pero servía una forma de distracción además de que era mejor que nada.

Sus pasos no provocaban sonido, se desplazaba bastante silencioso y así había podido darle un buen susto a uno que otro empleado e incluso otras maquinas que se encontraban rondando en la profundidad de la bodega. Nada parecía haber cambiado desde la ultima vez que decidió pasearse por ahí en vez de directamente salir de ese lugar, a excepción de la falta de alguna que otra caja o pieza salida de lugar, pero todo estaba bastante bie-

Fuck

Sus ojos rodaron de manera rara, y en conjunto a la maldición salió un sonido de falla, teniendo un espasmo en ambas manos. Su visión regresó unos cinco segundos después. Estúpidos glitchs.