Acababa de llegar de un para nada agradable viaje,  detestaba en demasía el tener que estar sentado en un avión durante horas sin nada que hacer además de revisar unos cuantos papeles que al final le causaban dolor de cabeza y observar películas sin chiste. Siempre terminaba  escuchando música e intentando dormir, cosa que jamás lograba. Ahora para su buena suerte ya se encontraba en su destino, al haber puesto un pie ahí sintió...¿nostalgia?, si quizás eso era pero no era tiempo de estar pensando en el pasado, debía alistarse para la reunión de esa noche, ni siquiera descansar podía, mucho menos lamentarse por cosas sin remedio.

Al bajar del avión ya alguien le esperaba para llevarlo a su destino aunque no se trataba precisamente de su hogar si no de uno de los hoteles donde solía alojarse cuando estaba en la ciudad el cual pertenecía a su padre, no tardaron mucho en llegar, el joven rubio bajo y se dirigió de inmediato a su habitación para arreglarse a regañadientes con la ropa que habían dejado solo que, como de costumbre, le dio un toque propio aun cuando solo lo hiciera para molestar a su padre o hermanastro. Una vez que estuvo vestido y arreglado salió del hotel en dirección al lugar acordado.  Al llegar se detuvo solo un momento para visualizar el enorme letrero con luces neón que decía "Red Light", saludo a los que se encontraban en la entrada como si fuesen amigos de toda la vida y termino por adentrarse en el vistoso lugar lleno de luces, pasando entre distintos tipos de personas, mientras la estridente música llegaba a sus oídos con mas fuerza a cada paso que daba pero realmente no le prestaba mucha atención a ello, estaba mas al pendiente de a quien debía encontrarse allí. Siguió su camino hacia un rincón del lugar donde seguramente estaría su "hermanito", soltó un suspiro pesado y se detuvo en seco al vislumbrar rostros conocidos, ¿realmente era necesaria su presencia?, Caden ni siquiera le soportaba y eso arruinaría su humor, aunque si lo pensaba mejor eso sería perfecto para entretenerse. No logró llegar a una conclusión sobre que hacer cuando uno de los invitados ya le había notado y se dirigía a toda prisa hacia el, se trataba de un molesto chico que siempre parecía tratar de agradarle.-¿Cuando llegaste?...joder, deberías haberme avisado- El rubio se mantuvo callado como si no acabara de escuchar a Frank articular aquellas palabras con una voz semejante al pitido de un auto. Volvió la vista hacia la mesa que se encontraban los demás mientras hacia una seña con la mano a Frank para hacerlo irse, ¿es que acaso no entendía?. -Que carajos te importa...- Dijo de manera seca y se lo quito de encima con un movimiento brusco solo para posarse junto al de cabello bicolor. -Felicidades hermanito- Dijo con una falsa sonrisa mientras su mano se posaba sobre el hombro ajeno.

vestimenta: